
El soul ya me gustaba desde que era un carajito. Y creo que fue por culpa de esta canción. Sí, la que ven a la izquierda.
Antes de hablar de ella, perdonen que me queje por un minuto, pero es ahora o nunca: ¿por qué no fui pilas y no le martillé a mis padres este disco, ahora que lo pienso? Tal vez porque no sabía siquiera cómo pedirlo: quizás pensaba en el apuro que sería decirles ¡esa, esa es la canción, papá!, y que ellos tuviesen que ir entonces a una discotienda del Unicentro El Marqués con la melodía en la cabeza y se la cantasen al vendedor hasta que el vendedor adivinase la canción, ya fuese en LP o en esos de 45 rpm, con el redondo grande como yo les decía. O porque pensaba, en mi seis o siete años, que quien cantaba Midnight Train to Georgia era una rubia alemana y no esa negra maravillosa que es Gladys Knight, y a lo mejor asumí que no sería fácil encontrar el disco de una cantante alemana, rubia para más señas, porque en Caracas toda esa música era en inglés.
Yo qué sé.
Lo cierto es que la ponían en Radio Capital casi todas las mañanas, cuando estábamos metidos en la cola del distribuidor Altamira de la Cota Mil, rumbo al colegio, y en la cornetita de la radio del Volkswagen de mi viejo ya sonaba a canción de toda la vida. La escuchaba siempre con mucho deleite y pedía por favor que no cambiasen el dial hasta que terminara; entonces imaginaba a la rubia dándolo todo frente a un micrófono mientras el coro de rubios alemanes -¡uh uh!- la complementaba, como seguramente habría salido en De fiesta con Venevisión.
Ahora trato de entender por qué pensé que era alemana. Puede ser que me recordara la forma en que hablaban algunos vecinos germanos del edificio donde vivía. O fue que su forma de cantar, tan deliciosa, plena, con ese silabeo tan rotundo, era una afrenta a mi inocencia.
Y esos uhs, y esos ohs... es como si esa canción hubiese sido escrita para ella y solo para ella (aunque la cantó Cissy Houston un año antes) y estuviese Gladys toda la vida practicándola antes de meterse en el estudio de grabación y soltarla de una buena vez. Que ya era hora.
Ni hablar de ese toque gospel tan exquisito que un descubre ahora entreverado en la melodía, gracias a los miles de kilómetros recorridos que tienen tus oídos. O de los Pips... ¡Ah, The Pips!, que son un instrumento más: un trombón o un par de trompetas, un saxo vacilándosela, una orquesta entera resumida en unos coros, con ese fraseo de contestación que es tan religioso y cómplice.
Y esos uhs, y esos ohs... es como si esa canción hubiese sido escrita para ella y solo para ella (aunque la cantó Cissy Houston un año antes) y estuviese Gladys toda la vida practicándola antes de meterse en el estudio de grabación y soltarla de una buena vez. Que ya era hora.
Ni hablar de ese toque gospel tan exquisito que un descubre ahora entreverado en la melodía, gracias a los miles de kilómetros recorridos que tienen tus oídos. O de los Pips... ¡Ah, The Pips!, que son un instrumento más: un trombón o un par de trompetas, un saxo vacilándosela, una orquesta entera resumida en unos coros, con ese fraseo de contestación que es tan religioso y cómplice.
Sin ellos, Gladys habría estado en el aire. Sus voces y la de ella se entrelazan mejor que un adn.
La letra la conocí no hace mucho, advierto. Tanto la escuchas que crees que te la sabes y te montas una historia en la cabeza que no es la que es, y luego por curiosidad vas y la buscas y te das cuentas de que se trata de algo totalmente diferente. Y entonces se renueva otra vez. Porque mira que pasan los años y esta bendita canción no envejece.
Les dejo esa estrofa fabulosa que resume todo lo que la letra quiere decir:
Les dejo esa estrofa fabulosa que resume todo lo que la letra quiere decir:
I'd rather live in his world
Than live without him, in mine.
Than live without him, in mine.
Y un video de ella -y ellos- en la televisión estadounidense, cantándola el año que la lanzaron:
Nada más que decir.
(Bueno, sí: ¡uh uh!)
(Bueno, sí: ¡uh uh!)
esa cancion me trae muy buenos recuerdos de los setentas,y mis primeros escarceos amorosos en las discos caraqueñas,por supuesto bailando sobre un ladrillito,si Xoan fantastico tema,gracias por esta delicia de post
ResponderEliminardivino, divino, divino!!! este blog me encanta!!! oh juan! si supieras cuán musical soy no me juzgarías por mi forma de no saber poner un vinilo en el plato... <3
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